miércoles, 28 de noviembre de 2018

Nos lanzamos a una nueva aventura de cine con el ciclo "29 Fotogramas".

Confieso que uno de mis sitios preferidos en el mundo es una sala de cine a oscuras. Y allí vivir mil vidas, y enamorarse, llorar, reír, aprender, reflexionar, levantar el puño ante la épica y encoger el corazón ante el drama. Sentir la piel de gallina cuando la poesía visual flota en el aire, entre las motas de polvo que se descubren en el haz de luz y que se convertirán en vida sobre un mural blanco durante casi dos horas. Me imagino a los hombres en las cuevas y el temblor de las antorchas que animan pinturas, o las cristaleras de las catedrales que muestran la grandeza de un Dios, que a lo mejor es pura ficción, quién sabe. O esos primeros artilugios mecánicos que con movimiento y luz arrancaban exclamaciones de asombro en las barracas de las ferias nómadas. Luz e ilusiones que se convierten en verdades, relatos que pueden conectarnos con nuestro entorno o evadirnos para reflexionar sin darnos cuenta sobre nuestra propia naturaleza humana. Y algunos somos inquietos, queremos seguir viviendo mil vidas, pero también conocer cuáles son los mecanismos que se esconden detrás de esa gran ilusión que es el cine.



Desde la Asociación Cortos de Vista, tras consolidar el festival de cortometrajes que ya tiene dieciséis años a sus espaldas, nos hemos lanzado a nuevos desafíos con renovadas energías. El primero de ellos es el ciclo de cine "29 Fotogramas". Con él queremos acercar la producción cinematográfica de Málaga o en Málaga o con un especial protagonismo de Málaga dentro de su equipo artístico. Una vez que la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Nerja mostró su apoyo decidido a este proyecto se inició el 25 de noviembre con la proyección de la película "Maniac tales", inscrita dentro del género de terror, y más concretamente al de antología de relatos fílmicos .  Se trata de una producción independiente con vocación internacional, rodada en inglés, que tiene como impulsor a Kike Mesa al frente de Kandale Films en las facetas de productor, codirector y coguionista. Además cuenta con la participación en su equipo en el apartado de efectos especiales y maquillaje con el técnico Amador Rehak y como intérprete en "Cimbelin", uno de los fragmentos de la antología. Dicha proyección en el centro cultural Villa de Nerja coincidía con su estreno en salas comerciales de todas España.



Nuestro objetivo, además de dar visibilidad a estas películas que lo tienen en ocasiones muy difícil para llegar al gran público, es conocer de primera mano los entresijos que rodean a su proceso creativo y la vida posterior de comercialización. Así tras la breve presentación por parte del maestro de ceremonia José Manuel Medina y la bienvenida de la concejala de Cultura, Anabel Iranzo, se proyectó el film en formato dcp 2k gracias al apoyo técnico de Miguel Ángel Moreno. Seguidamente Kike Mesa, Amador Rehak, Olivier García y José Manuel Medina charlaron sobre cómo nació esta película, los distintos obstáculos que tuvieron que sortear, cómo se recrea un mundo de mentira para convertirlo en una verdad. La película se grabó en parte dentro del edificio La Equitativa de Málaga haciéndolo pasar por uno situado en Nueva York. La incipiente cinematografía malagueña con el impulso del Festival de Cine de Málaga también fue objeto de conversación, con un colectivo, el de productores que ha unido esfuerzos para la promoción y la visibilidad en la búsqueda de financiación y posterior comercialización. Amador comentó los momentos de mayor satisfacción en una producción con limitaciones, pero que a su vez le hacía agudizar el ingenio a la hora de resolver problemas técnicos y encontrar soluciones visuales. Olivier señaló la gran experiencia que fue para él participar en un proyecto de este tipo tras formar parte en el reparto de varios cortometrajes y su predisposición a arrimar el hombro en cualquier departamento de producción.



Todos subrayaron su amor incondicional por el cine, profesión ingrata en muchos casos en la consecución de los resultados, que pueden distar en años luz de lo que se imaginó en la cabeza de sus creadores y responsables a lo que queda confinado en la actualidad en un gran archivo de gigabytes. Seguro que soñamos hacer realidad grandes mentiras, como que podemos domar la luz y el tiempo a nuestro antojo. Que la vida cultural en un pueblo sureño existe y que es de una efervescente agitación. Que tras la sesión un buen número de amigos se reúne para hablar de cine. O todo es una ilusión que se desvanece cuando aparece en la pantalla la palabra fin (hecho que creo ya no ocurre en las películas modernas) y las luces de la sala se encienden.


 Trailer de la película "Maniac tales".