"Yo estoy vivo y vosotros estáis muertos". Así tituló Emmanuel Carrere su biografía sobre el escritor alucinado y visionario Philip K. Dick. Y esta línea de diálogo resume la novela "Ubik". Ubik es el producto que da nombre a todo tipo de artículos que te harán la vida más fácil. Cada capítulo comienza con un texto publicitario de la omnipresente y todopoderosa marca. ¿Aceptáis estas cookies en una novela de papel? Ahora cualquiera página que leamos en internet es invadida por anuncios que extrañamente están relacionados con nuestros intereses, incluso si estos no los hemos puesto de manifiesto en la Red. ¿Nos vigilan? Estas y otras "paranoias" que vosotros diréis si son justificadas trasladó el escritor americano a sus novelas y relatos.
Los géneros son coartadas para que el autor "¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas" dude de la Verdad. Porque la Verdad es revelada a través de los sentidos y da forma a nuestro universo consciente. ¿Pero son fiables nuestros sentidos?¿Hay corporaciones interesadas en manipular nuestra percepción?¿Dónde está la frontera entre consciencia y sueño, entre vigilia y cuerpo?¿Entre vida y muerte? El novelista nos narra que la Ciencia ha posibilitado que la tecnología nos permita conservar la conciencia de los fallecidos. Su carne está muerta pero su mente puede contactar con cualquiera que pueda permitirse pagar una cápsula en Suiza que conserve durante un periodo de tiempo limitado. Por otro lado las multinacionales interplanetarias luchan por el control financiero reclutando a comandos de personas con poderes: telépatas y precogniscientes. El tiempo se dobla, el destino pierde toda entidad. Todo se pone en duda.
"Ubik" es un punto de partida para mucha de la Ciencia Ficción que nos llega por cine, novela y cómic. Se cuestiona si realidad es creíble y quién le da forma ante nuestros ojos. Solo se necesita a un protagonista, el "Elegido", que señale las grietas del molde de construcción por las que se fuga la "Verdad". Pero esto es solo parte de un bucle sin fin.