Durante los 80 Prefab Sprout hicieron dos discos que los encumbraron en las listas de ventas, Steve McQueen y From Langley Park to Memphis. Paddy MAclloon, el lider de la banda, se desvelaba como un compositor de especial sensibilidad y perfecto arquitecto de estructuras melódicas pop. Pero con la nueva década y con Jorda:the comeback llegó su canto de cisne en cuanto popularidad y sus trabajos discográficos se fueron espaciando. El propio proyecto musical fue disminuyendo en cuanto a componentes hasta quedarse MAclloon como único activo dentro de la banda, refugiado en su universo de canciones pop perfectas, pero por las que parecía que nadie de la industria musical estaba interesado en oír.
25 años después.
El último disco de la banda fue a principios de este siglo, The gunman and anothers stories y poco más se supo. En estos días leo y oigo con regocijo que se ha rescatado un disco maldito y perdido del año 1992 “Let´s change the world with music”. Guardado en el baúl de los recuerdos, sale a la luz tal y como su autor quería, sin los condicionantes ni las imposiciones de los ejecutivos. Compruebo que ahí siguen las grabdes anciones, que los arreglos marcados por los signos de los tiempos le dan un halo de atemporalidad pasadas casi dos décadas. Que una perfecta canción pop añade capas y capas de significado con el paso de las hojas de almanaque. Se carga de recuerdos, anhelos, deseos y promesas, unas cumplidas y otras pendientes.
Todo esto me sirve para quitarle el polvo de encima al vinilo de "Steve McQueen", y escucharlo varias veces seguidas. Y la aguja del tocadisco permanece impasible cuando me estremezco al escuchar esta canción.
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