El maná de talentos en la industria del cómic no para de darnos alegrías. El dibujante y guionista Daniel Warren Johnson es una de las apuestas seguras de diversión y sentido de la maravilla. El primer acercamiento a su obra fue "Extremity", una odisea postapocalítica de luchas despiadadase entre clanes en la que la violencia se muestra como la única herencia entre generaciones. Su dibujo febril, desatado en escenas de acción, pero con una narrativa clara en composición de página, te coge de las solapas y te sube a la montaña rusa par disfrutar de un viaje vertiginoso hacia la redención y el perdón. Estos temas ya eran tratados en su autoeditado "Space mullet", trampolín hacia empresas artísticas de mayor repercusión, pimero en las editoriales indies con "The ghost fleet", la mencionada saga "Extremity" y la llegada por loa puerta grande a las grandes a través del personaje icónico de la DC Comics Wonder Woman.
Ello no ha supuesto la pérdida de sus señas de identidad ni modificar su universo visual para limar la violencia. "Wonder Woman - Tierra Muerta" forma parte de la colección de títulos "DC Black Label" con la que se quiere retomar el espíritu más libre y adulto de la Línea Vértigo, que tan buenas lecturas propició. En dos tomos nos encontramos de nuevo en un territorio postapocalíptico devastado por criaturas mutantes. Wonder Woman despierta tras años de lo que parece una hibernación. Apenas recuerda que ha ocurrido en el pasado. Gracias a la pandilla de preadolescentes que la descubrió toma conciencia de la necesidad de su liderazgo en el clan de supervivientes. Es otro viaje épico en torno a la responsabilidad de ejercer el poder, de su control, de las consecuencias de la violencia, de la necesidad del perdón y otorgar segundas oportunidades. Daniel Warren Johnson despliega virtuosismo cinético en las escenas de acción, que tienen como contrapunto los momentos de quietud y reflexión sobre el papel del héroe. Trazo paralelismos con la película "Mad Max Fury Road" en la impresión que me supisieron estas dos obras de la cultura popular en donde el papel de héroe está encarnado por una mujer, con capacidad de liderazgo al mismo tiempo consciente de sus debilidades, que se pregunta por el sentido de la lucha y de sus consecuencias en un entorno hostil, en una carrera sin respiro frente al Mal. Y asume en una orgía visual cuál es su sino dentro de la construcción de una nueva civilización.