Los publicistas cuando lanzan una campaña para promocionar cualquier artículo ponen todo su empeño para conseguir el mayor impacto en la sociedad. En algunas ocasiones una frase ha quedado como seña de identidad de una marca y en otros casos los comentarios negativos sobre una campaña publicitaria han conseguido el fin último de la publicidad: que se hable de la marca y del anuncio.
A diario nos fijamos en el peine cuando nos peinamos o alisamos nuestro pelo, observando la de cabellos que se nos caen. La alopecia, sinónimo de calvicie un mal de nuestro cuero cabelludo, nos sorprende a algunos a temprana edad y a los más en su senectud. Y sorpresa también cuando visitas al dermatólogo de quien esperas una solución para tu alopecia y le observas una incipiente calvicie o una cabeza limpia de cabello.
La publicidad con sus reclamos nos anuncia las próximas fiestas navideñas con burbujas efervescentes o con un personaje al que todos conocíamos por el calvo de la tele o de la lotería, pues nos invitaba a participar en el tradicional sorteo de Navidad. La compañía publicitaria que contó con Clive Arrindell, que así se llamaba el actor británico que dio vida a ese personaje publicitario de la televisión desde el año 1998 a las navidades del 2005, dejó de contratarlo para el anuncio de la Lotería. Curiosamente, no padecía alopecia sino que se rasuraba la cabeza para interpretar ese personaje.
Quizás otras iniciativas hicieron que no se contara con Arridell como reclamo publicitario, cayendo el calvo de la tele en el olvido hasta que en este año 2013 el efecto negativo del spot de la Lotería, nos haya hecho recordarlo. Las redes sociales tan rápidas en difundir todo lo cercano y más lejano, ha encontrado en el anuncio motivos para montar vídeos caricaturizando a los personajes de este año. El fin último se ha conseguido: hablar del anuncio y de la publicidad.
La tele y el cine nos acercó a otros artistas que lucían una cabeza limpia como una "bola de billar". Yul Brynner, Telly Savalas que interpretaba al teniente Kojak de la conocida serie. Otro calvo que nos entretuvo muchas tardes, el que daba vida a uno de los personajes de la serie la Familia Addams. En su aseo diario no dejarían un solo cabello sobre el lavabo ni en el peine.
Con calvo y sin calvo ¡Qué la suerte te acompañe!, como dice la voz en off del anuncio.
Por Ricardo Bajo León.
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