Perdedores en la noche. Nikki y Sánchez buscan la última oportunidad de acabar con su mal fario con quimera de un galgo. Una pareja con reminiscencias al Bartleby de Melville, renegados de la suerte, caminan, circulan por la noche madrileña en una novela iluminada por las farolas de los polígonos y las tragaperras de bares de mala muerte. Un trallazo de poca más de 100 páginas en la que la escritora malagueña Esther García Llovet nos conduce en los asientos traseros de un coche entre pijos y náufragos del "milagro económico español". Entre el relato negro y el retrato costumbrista de los arrabales de una gran ciudad, "Sánchez" se convierte en una lectura ideal en tiempos de confinamiento para perderse en los sueños de una noche vacía.