Tenía curiosidad por ver cómo se forjaban esos relatos y presencié un taller de proyectos, en el que ponen en conjunto los textos de cada uno para afinarlos. Tuvimos la oportunidad de hablar con Marisol Calvelo, Maribel Martín y Ricardo Sanz del proceso creativo, la depuración a la que hay que llegar para narrar con satisfacción en menos de 200 palabras. Cómo burlar el miedo al folio o la pantalla en blanco.
De este encuentro asume que el arte de la escritura no surge de la simple inspiración. Que tiene su componente de reflexión sobre lo escrito, y más en un relato de tan corta extensión. Buscar la palabra adecuada, el punto y la coma justos, hacer frente a la concreción no como un obstáculo insalvable sino como un reto que despierte nuestra imaginación.
Al margen de la colaboración que mantienen con Nerja Pop, los miembros de este taller participan en multitud de concursos literarios, preparan poemarios y próximamente verán la luz interesantísimas propuestas, que por lo que nos estuvieron comentando, estamos deseando ver y leer.
Sus cuentos os esperan para ser vividos todos los miércoles en Nerja Pop.
1 comentario:
En el taller de escritura que estoy haciendo nos han mandado un ejercicio sobre microrrelatos.
La verdad es que es un poco difícil, pero también muy interesante. Es duro condensar una historia en pocas palabras, aunque algunos de los cuentos de mis compañeros de taller son buenísimos.
Un saludo.
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