Mirando a las musarañas (36) - La clac.

Era una costumbre generalizada del mundo del teatro la de que algunas personas amantes del genero y sin recursos se prestaran a aplaudir  en algunos pasajes de la obra a indicación del artista o del jefe de la clac. Para que aplaudieran de manera ruidosa previamente habían sido  remunerados con unas pesetillas, o bien con el regalo de la localidad que, por regla general, era de "gallinero". Situados estratégicamente "rompían el hielo" para que los demás espectadores iniciaran sus aplausos.

Hace unos días y como otra costumbre también generalizada, visité unos grandes almacenes  y, paseando por unas de las secciones de moda, me dí cuenta de la cantidad de diseñadores españoles que hay. No hace falta recurrir a nombres en francés para llamar la atención. Marcas cómo Elisa García, Lola Ramírez o Pedro de Osa sirven para llamar la atención, y más si echamos  un vistazo a la etiqueta con un precio medio de 500 euros cada modelito.

Eso me hizo pensar en la clac teatral. En estos tiempos de tantos mensajes publicitarios existe una cla de la moda, que no son otros a los que se le ha dado en llamar la" beautifull people," que, en lugar de aplaudir, pregonan a los cuatro vientos el nombre del diseñador del modelito que lucen ese día. La televisión y demás medios se encargarán de divulgar la noticia, con lo que Elisa García, Lola Ramirez y Pedro de Osa, sólo tienen que marcar el precio. La cla funcionó sin aplausos, pero eso sí asistieron elegantemente vestidos sin costo alguno. El anzuelo está echado, ya picaran.

No hay nada nuevo bajo el Sol. Los personajes de la clac teatral eran modestos y los de la moda pertenecen a la "arta sociedad" o cómo dijo la flamenca "La Mojama".

¡Qué arte!  

Por Ricardo Bajo León

Foto extraída de aquí.